Hoy selecciono un cuento... Infiel, para que lo leas y lo comentes, gracias por compartir.
Angus Loke
Un hombre estaba sentado en un acantilado mirando el mar, el cielo gris plomizo agregaban el marco apropiado para su melancolía, la duda, la furia y su propia pasividad, lo atormentaban.
Sabía con total certeza que su esposa y su mejor amigo disfrutaban su ausencia juntos, descubriendo una pasión hace tiempo olvidada por él.
Bebía en silencio la hiel de la traición, mientras decidía si terminar con su vida o con la de ellos, notó un reflejo en el agua que se tornaba naranja lentamente. Una botella flotaba en el agua, agudizó la vista y noto que había un papel dentro.
Olvido por un momento su drama e imagino que tal vez aquella botella trajera un mensaje importante, un pedido de auxilio, alguien necesitando ayuda y el ahí estaba... dudando.
Se arrojó al agua y nadó con esfuerzo hacia la botella, miro y sonrió irónicamente pensando que era similar a las que había dejado vacías en el lugar donde había estado sentado, le costaba mantenerse a flote y un calambre cruzo su pierna derecha paralizandola.
Su estado de ebriedad lo había llevado a esa incomoda situación, pero aun así logro tomar la botella, hizo un giro y trato de nadar hacia la playa.
No podía más, sus fuerzas lo abandonaban y poco a poco retornaba aunque muy tarde su lucidez.
Su vida fue repasada en una centésima de segundo.
La policía tocó a la puerta del chalet, la mujer envuelta en una sábana de seda abrió la puerta, el oficial la observó por un momento, no era joven, pero su cabello despeinado y su maquillaje corrido daban cuenta de lo que había sido una tórrida noche.
La luz del sol hería sus verdes pupilas y le daban un brillo anaranjado a sus carnosos labios.
El policía cumplió en informarle que un hombre había sido encontrado en la playa, ahogado y que se rumoreaba que vivía allí.
Una voz masculina se escucho de fondo con una nota de preocupación, ella pidió un minuto para vestirse y luego acompañar al oficial.
Se vistió rápido, camino junto al policía que la miraba disimuladamente, era una mujer muy llamativa, con curvas interminables y unos modos dulces y refinados.
En la arena blanca yacía el cuerpo sin vida tapado por una manta.
Se acercaron y saludaron a otro policía que vigilaba el cuerpo, el que la acompañaba levanto la manta y ella miró su rostro.
Un rayo helado la golpeo, que lívido no perdía su atractivo, más aun resaltaba sus rasgos.
¿Es su esposo? - Preguntó el uniformado secamente. Asintió mientras una lagrima corría por la blanca y suave mejilla.
El tipo la miraba algo disgustado, sabía que ella estaba con otro la noche en que su propio esposo moría ahogado, esto no le caía para nada simpático.
Ella miro con curiosidad la botella a la que aun se aferraba el cuerpo inerte, con esfuerzo lograron soltarla de la mano del muerto.
Había un papel dentro, parecía bastante antigua la nota, el segundo policía se acercó también y con mucho cuidado desenrollaron el papel castigado por el tiempo.
La escritura era antigua, prolija y en estilo gótico, decía en prosa escueta y contundente...
"La muerte es como una esposa infiel, te sonríe mientras te roba la vida."
Angus Loke
Argentino
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